Zagora
- El Diario de Chloe
- 16 feb 2019
- 2 Min. de lectura
Zagora es una ciudad en el valle del río Draa, en la región de Drâa-Tafilalet, ubicada al sureste de Marruecos. Está flanqueado por la montaña Zagora de la cual el pueblo obtuvo su nombre.

En nuestra excursión tuvimos la oportunidad de conocer la vida de los marroquíes y fue muy duro, a la vez que gratificante, ver que su vida y su cultura estaba arriada a la nuestra. La diferencia entre nosotros y ellos es la evolución y la economía. Ellos se mueven a pie, en burro o en camello. Sus casas son de adobe, de color rojizo. Lugares muy acogedores que han creado ellos mismos con su propio esfuerzo. Los niños van a la escuela a pie o en bici y juegan con otros niños en la calle, algo que ya no veo tanto en nuestro país y que tanto anhelo.
En nuestro trayecto, visitamos varios bares y restaurantes, valles y pueblos, y yo me enamoré de uno en concreto, Uarzazate. Es una ciudad al sur del Alto Atlas marroquí, famosa por ser la puerta de entrada al desierto del Sahara.

Pasar una noche en el desierto cuando viajas a Marruecos es esencial para mi, por todo lo que logras ver en el camino. Su gente, sus hogares, su forma de vida y su cultura. Te ayuda a valorar lo que tienes, te cambia el chip por completo y es una experiencia que te ayuda a reflexionar y a ver la vida de otra manera completamente diferente.

Una vez lleguemos al desierto, nos ofrecieron una cena rica, sana y calentita, y Posteriormente nos sentamos en la arena para disfrutar de un té marroquí y un espectáculo berever con fuego incluído.

Dormimos en una jaima y a la mañana siguiente vimos el amanecer, una experiencia maravillosa e inolvidable. Sentí el silencio, la brisa recorriendo mi piel y pude ver como el sol se elevaba frente a mí. Sentí una paz interior que recorrió todo mi cuerpo que me hizo sentir plena y tranquila conmigo misma.

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